Manuel Ángel/ de mujeres hermosas y hombres inteligentes

Ortega se sabía rodear de mujeres hermosas y hombres inteligentes.

En un microespacio de Radio 5 dedicado a no sé qué aniversario de José Ortega y Gasset, el 8 de diciembre de 2005 una mujer perteneciente a una fundación dedicada a este filósofo, nos quería convencer de lo sociable que era y el don de gentes que tenía, dejando caer esta perla.

Analicémosla un poco: ¿cabe invertir los términos?: “Ortega se sabía rodear de mujeres inteligentes y hombres hermosos” ¿A que suena mucho más inquietante? Podríamos pensar que se trata de un homosexual o, sencillamente, de una mujer. En cualquier caso sería muy chocante una frase construida en estos términos.

Curioso que sea una mujer quien presume de que su admirado filósofo (debe admirarlo si dedica sus esfuerzos a una fundación dedicada a divulgar la obra de don José) se rodeara de mujeres a las que no se les pedía que fueran inteligentes, de la misma manera que se rodeaba de hombres a los que no se pedía que fueran hermosos. Habría que preguntarle qué es lo que la ha acercado a ella a la fundación, si el ser bella o el ser lista.

Claro que si es una sutil forma, por parte de esta mujer, de denunciar una cierta misoginia de este señor tan castizo, a lo mejor habría que darle por bueno el matiz.

Mal van las cosas si todavía para hacer la alabanza de una persona se equilibra la inteligencia de los varones con la belleza de las hembras; y mucho peor si esa equiparación se hace entre personas que se supone manejan un buen discernimiento.

Volviendo a las alternativas a la frase, ¿nos serviría “Ortega se sabía rodear de personas hermosas e inteligentes”? Desde luego dejaríamos fuera a la gente hermosa y necia, y a la gente inteligente y fea; porque si ya es un error contraponer mujer y hombre, lo es también contraponer lo inteligente con lo hermoso.

En fin, yo no sé bien de qué iba Ortega, pero si sólo quería de las mujeres la belleza y de los hombres la inteligencia, me temo que a mí no me ha seducido la presentación que de él hace esta mujer de su fundación (posiblemente se trata de que, aunque ella pueda ser tan hermosa, yo no sea tan inteligente).